19 Abr Semana 15
Está semana ha sido tranquila. Después de haber estado diez días de viaje ahora toca recuperar los trabajos pendientes, ordenar y revisar el montón de papeles y planificar la semana.
Lo primero que he hecho está semana ha sido catar y comprobar la analítica de dos vinos que deje preparados para que embotellaran durante el tiempo que he estado fuera. La verdad que estaban los dos perfectos.
Después he estado revisando y colocando un montón de papeles que me estaban esperando encima de mi mesa. También he tenido la visita de varios comerciales de corchos, enológicos y botellas, labor que le toca hacer a un enólogo, ya que esos materiales van ha formar parte de la calidad de un vino.
Lo más importante de esta semana, y de lo que más pendiente tenemos que estar, es que hemos recibido la visita de la enóloga de un gran importador. Ha venido para catar los vinos que tenemos y la calidad de los mismos. Hemos estado catando vinos de los depósitos y de las barricas. La cata duró toda una mañana, desde las nueve de la mañana que empezamos hasta la hora de comer, unos cuarenta vinos.
Me ha dado la impresión de que los vinos le han gustado bastante, y que están dentro de lo que buscan para su mercado. Nos ha pedido que le enviemos muestras de algunos de ellos para catarlos con su jefe y su equipo de cata.
La próxima semana nos darán las respuesta, la verdad que tengo mucha confianza en esos vinos y confío en que se va ha convertir en una gran venta.
Está operación es gracias a la directora de exportación, aunque al final los que tienen que cumplir el expediente y obtener la aprobación del consumidor son los vinos, si detrás no hay un buen vendedor que le de esa oportunidad, de nada sirve que sean buenos.